Salut j'ai besoin d'une bonne correction ! Donc il faut changer les verbes du présent au passé et améliorer un peu le texte si possible. Merci d'avance
En medio del ruedo, el toro y el torero se encuentran frente a frente, uno perezoso y el otro petrificado de miedo. Después de unos segundos, el matador se concentra y trata de calmar su miedo ante un toro tan grande, mientras el toro sueña en silencio. Pero cuando finalmente tuvo el coraje de moverse, comenzó a enojarse :
¡Ey toro! ¿Qué estás esperando?
El no reacciona, al toro no le importaba lo que dije el torero.El matador se enojó cada vez más e insultó al toro :
¡Estúpido!¡Débil!¡Hijo de mala madre!
Pero no reacciona, el matador se pone rojo, está furioso, hasta pudo ver salir humo de su cuerpo. Ya no sentía miedo porque el toro lo había irritado tanto con su indiferencia que la ira se había apoderado de su cuerpo. El público silencioso y el toro en sueños, el torero se precipitó a una velocidad inimaginable hacia el toro dejando atrás una nube de polvo. Corriendo hacia él golpeó de lleno en el estómago. El público permanece en silencio ante lo que acaba de ver:
El toro fue arrojado contra el borde de la arena pero el polvo nos impide ver lo que le pasó. De repente el toro salió de la nube de polvo, sus ojos estaban rojos como la sangre y era agresivo, sus cascos estaban sacudiendo todas las corridas de toros.
El matador estaba horrorizado ante este animal salvaje y gigantesco.
Frota el suelo con sus cascos y embiste al matador, el matador esquiva, el toro frena, patina y vuelve a embestir, el matador sigue esquivando pero el toro sigue y acelera cada vez más y el matador tiene cada vez más dificultad para esquivarlo. Sin embargo, el toro se detiene y no hay más ruido, un silencio de muerte.
El torero cae. Muerto de cansancio, se encuentra tirado en el suelo mientras Ferdinando abandonaba tranquilamente la arena gracias a la tormenta de polvo que había dejado atrás y que lo escondía.
Después de esta corrida la corrida tuvo menos éxito y Ferdinando regresó a casa sin contar su historia y por eso murió de viejo años después bajo su árbol, cerca de sus flores y solo con sus sueños.
En medio del ruedo, el toro y el torero se encontraron frente a frente, uno perezoso y el otro petrificado de miedo. Después de unos segundos, el matador se concentró y trató de calmar su miedo ante un toro tan grande, mientras que el animal soñaba en silencio. Pero cuando finalmente tuvo el coraje de moverse, comenzó a enojarse:
¡Ey toro! ¿Qué estás esperando?
Él no reaccionaba, al toro no le importaba lo que decía el torero. El matador se enojaba cada vez más y, después, insultó al toro:
¡Estúpido! ¡Débil! ¡Hijo de mala madre!
Pero no reaccionó. El matador se puso rojo, estaba furioso, hasta pudo ver salir humo de su cuerpo. Ya no sentía miedo porque el toro lo había irritado tanto con su indiferencia que la ira se había apoderado de su cuerpo.
Con el público silencioso y el toro en sueños, el torero se precipitó a una velocidad inimaginable hacia el toro dejando atrás una nube de polvo. Corriendo hacia él, lo golpeó en el estómago. El público permaneció en silencio ante lo que acabaron de ver.
El toro fue arrojado contra el borde de la arena, pero el polvo nos impidió ver lo que le pasó.
De repente, el toro salió de la nube de polvo, sus ojos estaban rojos como la sangre y era agresivo; sus cascos estaban sacudiendo todas las corridas de toros.
El matador estaba horrorizado ante este animal salvaje y gigantesco.
Frotaba el suelo con sus cascos y embestía al matador quien esquivó, pero el toro frenó, patinó y se volvió a embestir.
El matador seguía esquivando, pero el toro seguía y aceleraba cada vez más. Además, el matador tenía cada vez más la dificultad de esquivarlo.
Sin embargo, el toro se detuvo y no hubo más ruido: un silencio de muerte.
El torero cayó. Muerto de cansancio, se encontró tirado en el suelo mientras que Ferdinando abandonaba tranquilamente la arena gracias a la tormenta de polvo que había dejado atrás y que lo escondía.
Después de esta corrida, tuvo menos éxito y Ferdinando regresó a casa sin contar su historia.
Tiempo después, el toro murió de vejez bajo su árbol, cerca de sus flores y solo con sus sueños.
Appréciation :
Incroyable! Très joli texte, vraiment. Bien détaillé, structuré malgré quelques petites fautes de concordance des temps et de vocabulaire mal-utilisé ;)
J'ai fait quelques mini changements, et j'ai mis ton texte au passé comme demandé!!
Franchement, j'ai eu plaisir à corriger ton histoire, chapeau bas!
Lista de comentários
Hola :)
Correction :
En medio del ruedo, el toro y el torero se encontraron frente a frente, uno perezoso y el otro petrificado de miedo. Después de unos segundos, el matador se concentró y trató de calmar su miedo ante un toro tan grande, mientras que el animal soñaba en silencio. Pero cuando finalmente tuvo el coraje de moverse, comenzó a enojarse:
¡Ey toro! ¿Qué estás esperando?
Él no reaccionaba, al toro no le importaba lo que decía el torero. El matador se enojaba cada vez más y, después, insultó al toro:
¡Estúpido! ¡Débil! ¡Hijo de mala madre!
Pero no reaccionó. El matador se puso rojo, estaba furioso, hasta pudo ver salir humo de su cuerpo. Ya no sentía miedo porque el toro lo había irritado tanto con su indiferencia que la ira se había apoderado de su cuerpo.
Con el público silencioso y el toro en sueños, el torero se precipitó a una velocidad inimaginable hacia el toro dejando atrás una nube de polvo. Corriendo hacia él, lo golpeó en el estómago. El público permaneció en silencio ante lo que acabaron de ver.
El toro fue arrojado contra el borde de la arena, pero el polvo nos impidió ver lo que le pasó.
De repente, el toro salió de la nube de polvo, sus ojos estaban rojos como la sangre y era agresivo; sus cascos estaban sacudiendo todas las corridas de toros.
El matador estaba horrorizado ante este animal salvaje y gigantesco.
Frotaba el suelo con sus cascos y embestía al matador quien esquivó, pero el toro frenó, patinó y se volvió a embestir.
El matador seguía esquivando, pero el toro seguía y aceleraba cada vez más. Además, el matador tenía cada vez más la dificultad de esquivarlo.
Sin embargo, el toro se detuvo y no hubo más ruido: un silencio de muerte.
El torero cayó. Muerto de cansancio, se encontró tirado en el suelo mientras que Ferdinando abandonaba tranquilamente la arena gracias a la tormenta de polvo que había dejado atrás y que lo escondía.
Después de esta corrida, tuvo menos éxito y Ferdinando regresó a casa sin contar su historia.
Tiempo después, el toro murió de vejez bajo su árbol, cerca de sus flores y solo con sus sueños.
Appréciation :
Incroyable! Très joli texte, vraiment. Bien détaillé, structuré malgré quelques petites fautes de concordance des temps et de vocabulaire mal-utilisé ;)
J'ai fait quelques mini changements, et j'ai mis ton texte au passé comme demandé!!
Franchement, j'ai eu plaisir à corriger ton histoire, chapeau bas!
Bonne journée et prends soin de toi :)
Bon courage! ^^