De las crónicas de la ciudad Nadie jamás le había hecho caso. Lo empujaban, lo pisaban, le cerraban las puertas en las narices. Ese día, había permanecido horas enteras esperando que el funcionario escuchara todas las verdades que tenía que decirle. Tuvo que marcharse cuando todos habían abandonado las oficinas y él vio que la noche lo había cogido sentado en el taburete. cuando a la madrugada llego a su casa de latas y pedazos de carton, cuando Vio a lo lejos la cuidad como un reguero de lèche iluminada, se dijo a si mismo : No te desesperes. Todo cambira cuando dejes de ser invisible.
1. Diga, unas diez lineas, su opinion con respecto al personaje protagonista de este cuento